- Desesperado -

La tercera botella de trueblood terminó estrellándose en la pared de enfrente. Me encontraba algo molesto porque ciertos individuos indeseables, estaban haciendo que la gente se alebrestrara contra la comunidad de vampiros, asesinándolos a diestra y siniestra. Esa noche yo queria salir a divertirme, pero mi instinto de supervivencia me dictaba lo contrario <<Joder, quiero sangre fresca y no esta porquería>> me levanté del sofá y me asomé por la ventana de mi habitación. Parecía todo tranquilo, pero las apariencias engañaban... Cerré bruscamente la cortina roída con algo de desgano y suspiré algo resignado. << Creo que será una larga y aburrida noche>>

-Buenas noches Harket. ¿Puedo pasar?-

-De saber que vendrías Boss, te hubiera dado otra clase de recibimiento- Me mordí el labio y lo miré de arriba a abajo. - Siempre serás bienvenido a mi morada, me encantan ésta clase de sorpresas. Disculparás el tiradero pero casi acabo de mudarme y esto es una pocilga- le dejé paso para que entrara- Nadie ha querido venir a reparar las cosas, terminare haciéndolo yo solo. ¿Gustas algo de beber?

-Por supuesto que tiene potencial, y por supuesto me gustarían esos números. Necesito ponerla en funcionamiento lo antes posible. No me gusta vivir en el desorden.- torcí la boca- Bueno Boss, lo único que tengo para ofrecerte de beber es Trueblood o algo más caliente - Le indiqué mi cuello con el dedo indice- Pero algo me dice que ya estás completamente satisfecho ésta noche..., Por otro lado. - Me recargué en el marco de la ventana más próxima y lo miré. -¿A qué debo el honor de tu visita? debo reconocer que tengo mucha curiosidad.

Bufé al momento de mencionar que había faltado dos noches seguidas al Fangtasía, no me gustaba dar explicaciones a nadie, pero siempre ocurría con Eric << Doblar las manos ante el ya se está volviendo una costumbre>> pensé y torcí la boca- Me gusta mi trabajo Boss, y lo sabes de sobra. Sucede que antes de cruzarnos por la vida, yo estuve envuelto en algunas trifulcas con algunos grupos de humanos y parece que mi reputación me precede. No soy cobarde, pero me irrita sentirme observado todo el tiempo y no poder "descansar" sin preocuparme de que me ataquen a traición.

-Claro que sé con quíen me estoy codeando: "Eres el sheriff del área 5", lo tengo más que claro, y se que con cualquier orden tuya todos mis problemas se verían resueltos, lo que pasa Boss es... << Joder cuánto me cuesta abrirme>> Que no estoy acotumbrado a deberle favores a nadie. Inclusive a tí - Me separé del marco de la ventana y me senté al revés, en una vieja silla desvencijada - Siempre he vivido bajo mis propias reglas, valiéndome solamente de mí mismo. Si no los he matado es más por flojera que por cobardía. Desafortunadamente soy el único vampiro habitando por éstas hectáreas y sería muy sospechoso que ciertas personas indeseables, aparecieran con el cuello roto. Y ésto traería más problemas para mí, seria un cuento de nunca acabar Boss, y, sucede que no quiero irme a vivir a otra parte, aquí he encontrado algo que me gusta y no pienso dejarlo ir.

Me estaba haciendo una oferta muy tentadora, casi imposible de rechazar, y sabía como pagárselo por supuesto, no había punto de discusión, pero... << Siempre hay peros >> Cuando se puso en cunclillas y me preguntó directamente: "¿Qué era lo que había encontrado", supe que no iba a tener otra oportunidad como esa para decirle exactamente como pasaban las cosas. Acerqué un dedo a su rostro blanquecino y lo deslizé por todo su tabique nasal, para terminar posándolo en sus labios, mismos que acaricié delicadamente - Boss, hay cosas que deben permanecer en completo secreto - dije completamete serio, como nunca en la vida - Quizás no estés preparado para escuchar...

-No te enojes Boss, tómalo como lo que es, una tontería - Recargué mi barbilla en mis brazos y lo seguí observando- Pero te lo diré ce cualquier manera. << Dílo, es lo correcto >> Desde aquel encuentro en el que nos dimos algo más que un apretón de manos, ya no pude dejar de pensarte - reí y me levanté de la silla- Descuida no voy a llorar como una Magdalena, ni voy a suplicar por obtener un poco más de tu atención, tengo los pies bien plantados en la tierra- dejé escapar suspiro desde lo más profundo de mi pétreo cuerpo- Bien, ya lo sabes, ¿ahora que harás? ¿me vas a golpear? - No pude dejar de reír de nuevo- Lo siento Boss, por reír, quizás sea porque realmente me interesa saber qué es lo que piensas a cerca de lo que acabo de decirte.

-A mí también me gusta tu compañía Boss, y afortunadamente o desafortunadamente estoy consiente de lo que puede y no puede haber entre los dos. Ya sé que esa chica "extraña" te llama poderosamente la atención y contra eso no se pude luchar - Dije con un deje de coraje- Aferrarme a algo que sé, está negado para mí, es luchar contra la corriente, así que... Pierde cuidado, no es mi estilo armar escenas -ya sabes de cuales-. Le dí un pequeño golpe juguetón en el hombro y me puse en guardia, como si quisiera boxear- Respecto a tu ofrecimiento del Fangtasía, debo declinar tu oferta, no es nada personal... Me quedaré en casa y la acondicionaré para que la próxima vez que vengas te lleves una grata impresión.

-Está bien, si es por la buena, iré por la buena cuando se me ofrezca- dije todavía en el piso tras la llave que me había aplicado, luego me ofreció la mando para levantarme- De todos modos necesito arreglar aquí, la casa me gusta mucho, me recuerda a.. - Guardé silencio evocando momentos del pasado y continué- Ya te invitaré a la inauguración en cuanto esté lista, eso si no me ceno a los trabajadoreas antes de que la terminen.

-Buenas noches Boss- le contesté no sin antes robarle un beso y luego aventarlo fuera de la casa. Situación que me dió risa- Lo siento Mr, no puedo dejarlo más allá de las doce de la noche, o sino, la gente comenzaría con habladurías sobre mi honra- Le guiñé un ojo - Ya nos veremos la cara mañana por la noche Boss, buena caza.

-Sabía que dirías algo como ésto- Moví la cabza negativamente, sonriendo, pero me alegraba que no se hubiese marchado- Bien, ya que no podemos quedarnos toda la vida parados aquí, que no veo que tengas ganas de marcharte- cosa que agradezco- y que te vale un soberano comino lo que digan de mi honra; te invito a pasar lo que resta de la noche aquí en mi casa, dices que ya has cenado, así que no creo que quieras salir a dar una vuelta por ahí. ¿qué dices? Podemos pasárnosla bien.

Vaya que podía tener sentido del humor cuando se lo proponía- ¿Qué te parece si ambos nos enfundamos en tutú rosa y bailamos el cascanueces? - Me pusé en posición para hacer un paso Chassé - Me reí estruendosamente, en verdad que me la estaba pasando genial - Es buena tu propuesta, pero desafortunadamente no tengo luz, no hay malvaviscos... bueno quizás si- lo miré de arriba a abajo- Y por consiguiente no hay peliculas de terror. Pero... hay una cama bastante amplia en el piso de arriba... Podemos subir y... platicar un poco, si te apetece.

-En honor a tí, pediré que no me muevan esas telarañas de su lugar- .e recosté también sobre la cama , a un lado de él- ¿Esperabas ver un ataúd o algo similar? - Observé el techo por breves instantes- Dormir debajo de la tierra no va conmigo, lo hice durante mucho tiempo, y decídí que ya era hora de cambiar de estilo. -Cambié de posición y me recargué sobre mi antebrazo- Dime una cosa Eric, ¿Tú decidiste convertirte por voluntad propia o fué a la fuerza?