Meditando ( Libre)

.Después de tener que ausentarme del que había sido mi hogar,me sentía abrumado.
Decidí salir a pasear para distraer mis pensamientos, y meditar en todo lo sucedido y como resolberlo.
El bosque era un lugar acogedor de noche.
La luna llena iluminaba los senderos que se adentraban entre un sin fin de abetos, el frío viento de invierno alborotaba las ramas y las hojas creando un sonido que dificilmente dejaba escuchar el murmuro de las alimañas que allí vivían.

Camine tranquilo, bajaba el sendero despacio tranquila mente, despreocupado hasta que el movimiento de unos arbustos cercanos me advirtieron de una extraña presencia. Alguien me observaba.

Era la tipica noche en que apetece salir,sin rumbo fijo,simplemente camianr alejada del ruido de la ciudad,recordando antiguos momentos,....en fin,simplemente meditar.

El bosque.Ese lugar siempre me habia gustado,era tranquilo,y practicamente siempre estaba solo,asi que puse rumbo a el.Llegue,y cerre los ojos,respire aquel aire,con el paso del los años,se empiezan a apreciar mas las cosas pequeñas.Permaneci unos instantes asi,hasta que algo rompio mi concentracion:alguien o algo mas,se encontraba por los alrededores.En un principio no sabia de que se trataba,asi que intente permanecer desapercibida,entre las sombras.

Note un aroma familiar,y en un impulso contrario al primero sali de alli.Si,como me habia imaginado conocia al nuevo visitante del bosque.Schlange.Di unos pasos en su direccion y le salude cuando estaba a unos metros.

Sequia en alerta hasta que me percate de que de entre los arbustos salia una cara conocida.
Se trataba de Alexa, aquella vampira Rubia había conocido un tiempo atrás en el Fangtasy.
La mire relajado mientras se acercaba a mi, y cuando lo hizo me saludo.
La mire a los ojos y vi la luna reflejados en ellos estaba radiante.
--Hola Alexa, estas realmente radiante esta noche, me alegra el verte por aquí
Sonreí levemente.

Schlange correspondio mi saludo,asenti con la cabeza y continue hablando.Era toda una sorpresa,desde que coincidimos aquella noche,no habia vuelto a verle,creia que se habia marchado de la ciudad,por lo visto,estaba equivocada.

-Puedo decir lo mismo,aunque realmente esperaba encontrarme con nadie por aqui,y,menos contigo.-Segui caminando alrededor,era na noche preciosa,en la que esperaba estar sola,mis planes habian cambiado con este giro,pero pense que un poco de compañia no me vendria mal,...de todos modos ultimamente habia estado demasiado en soledad.

-Dime,¿que haces por aqui?-pregunte mientras observaba el cielo,cuando lo oi hablar,volvi la mirada hasta su posicion.

Continuamos andando por el sendero, el viento ahora soplaba un poco mas fuerte lo que nos alborotaba el pelo a ambos.
Me aparté el pelo de la cara
- Echo de menos mi tierra y mi rutina, creo que este sitio no esta echo para mi.
Me encanta la tranquilidad del bosque por la noche.
Aminore un poco el ritmo, puse la mano en el hombro de Alexa y le susurré
- Es gracioso pero después de mas de mil años aun necesito salir a contemplar cosas como estas para recordarme que aun puedo sentir algo de belleza en mi interior sobre algo que vive, y recodar muy vagamente que un día ya también fui algo latiente y vivo.
Hice un breve pausa retire la mano del hombro de Alexa y pregunte:
- Alguna vez has pensado que nunca te llegara el reposo eterno?

(Una cabra aparece de entre el bosque y comienza a mordisquear el vestido de Alexa... ante la mirada atonita de ella, Morweris sale de entre los arbustos retorciendose de risa...)

Empece a escuchar las palabras que me decia,cada una de ellas era familiar para mi,quizas esa era la verdadera razon por la que muchas noches me dedicaba a vagar sola por distintos lugares.

Me hizo una pregunta,la reflexione y me dispuse a contestarla,pero antes de que pudiera decir nada,senti un tiron de mi vestido,baje la mirada y me quede perpleja,una cabra,aparecio sin darme ni siquiera cuenta.De repente un olor familiar vino hasta mi,era la menade a la que habia conocido unas noches atras,parecia que la imagen le parecia divertida,pues lo demostraba con grandes carcajadas.

La cabra se retiro y ella termino por acercarse a nosotros.