Aburrido en el Fangtasia

Aquella noche tuve que ir al fangtasia a hablar con Eric, de unos problemas con mi padre, y dado que no tenía nada mejor que hacer; me quedé a ver a los bailarines un poco.
Pedí un Martini y me apoyé en la barra, con la mirada dirigida a uno de los bailarines, el cual se movía con movimientos tan rápidos, que un ojo humano no los podria haber captado.
Por el rabillo del ojo pude ver varios vampiros que fijaban sus miradas en mí, <<¿Tan mal le resultaba mi edor?>>, pensé.
Una de ellas era una joven morena, muy bella, aunque no pude captar los rasgos mas pequeños, ya que no quería recorrerla con la mirada, unicamente la ví de pasada.

La chica se acercó a mi y me habló y ,como no, usando aquel apelativo que tanto odiaba de los vampiros: "Lobito"
-Sinceramente, contemplando tu belleza, porque para matarte no me hacen falta los ojos-dije con una media sonrisa plantada en mi rostro.
La observé detenidamente, fijándome en el color de sus ojos, de un verde precioso, un verde azulado mas bien.
Me fijé que llevaba un vaso con Whisky, y me sorprendió bastante. ¿Que intentaba? Había visto varios vampiros con bebidas humanas, pero con intentenciones de disimular; pero estando en un bar de vampiros, me resultó extraño.

-Algo nuevo, por lo que veo. Acabas de llegar recientemente a la ciudad ¿Me equivoco?-dije sonriente. Bebí el martini de un trago y le dí el vaso vacío a Chow.
La noche acababa de empezar al igual que el turno de morten, que se subió a una tarima para bailar enmedio del bar.
<<Vaya mierda de noche, no hay nada divertido>> pensé.